Relatos Panameños

Lun, 01/04/2016 - 17:04

¿Alguna vez han notado lo colorido que puede ser nuestro país?, manteles floreados acompañan muchas de las mesas donde se vende el tradicional bollo calientito al final del día, así como también el pixbae; en nuestra moderna metrópoli se puede encontrar una casa con un buen linóleo decorativo, equipo de sonido, mientras que otras pueden tener diseños arquitectónicos con pilastras parecidas a las de los templos griegos, lo que el arquitecto panameño Darién Montañez llama en su blog (www.arquitectopana.com), “Arquitectura Feoclásica Panameña”. Lo cierto es que detalles como estos y otros conforman —nos guste o no— parte de nuestra herencia, y quedan grabados en la mente de quienes visitan el país.

Un español panameñizado

“Una de las primeras cosas que hice antes de llegar a vuestro país fue instruirme sobre la jerga, ya que otros amigos me comentaron lo curioso que pueden ser algunas palabras”, dijo Manuela, una española que lleva cinco años residiendo en el país, y añade: “siempre les recomiendo a mis amigas —en tono de broma y realidad— que antes de venir estén preparadas para escuchar, ‘psss, oye, mami’”.
Comentarios como el de Manuela se repiten a diario, e internet es testigo de lo popular que es el tema del “spanglish”, tanto así que existe en Wikipedia una lista de palabras del “español panameño” con su significado.

Uno de los cantantes más representativos del Istmo, Pedrito Altamiranda, lo llama en sus letras “Panañol” (español al estilo panameño), sus canciones reflejan la realidad y autenticidad de la vida en suelo istmeño, así también son una guía para quienes desean introducirse un poco más a la vida, y lo que ocurre en el patio y en la alta sociedad. A parte de esto Manuela, nuestra entrevistada, añadió que otra singularidad que nota bastante del comportamiento panameño es que se utilizan mucho las mímicas o los gestos para comunicarse. “Al pedir una dirección, puedes recibir por respuesta que la persona mueva la cabeza hacia arriba, dando a entender que el lugar queda más adelante”, dijo.

Bienvenido a la bulla

“Me encontraba en un aeropuerto en Alemania cuando de pronto escuché un escándalo en la sala de espera donde me encontraba, para mi sorpresa era causado por mis compatriotas”, nos contó Miriam, quien debido a su trabajo constantemente viaja. Y es que Panamá y sus ciudadanos conforman un conjunto de sonidos, desde el paletero de la Italiana hasta el sonido de las cigarras que indica que el invierno y Semana Santa está por empezar.
Es difícil encontrar o determinar por qué los panameños son “bulleros”, no obstante, existen creencias que indican que esto puede ser debido a nuestras características emocionales de naturaleza alegre de los latinos en general. Otra explicación se debe a que nuestros ancestros caribeños tenían que hablar alto para que sus voces se escucharan por sobre el sonido de las olas del mar.

Entre ceviche y 'frías'

Lugares emblemáticos para visitar hay muchos a lo largo de todo el territorio, cada uno con su encanto en particular. Sin embargo, si se busca vivir la experiencia del Panamá actual, el antiguo y la naturalidad cálida de sus residentes; entonces, el Mercado de Mariscos es el mejor referente. En esto concuerdan nuestros dos entrevistados, Manuela y Guillaume, quienes argumentan que en una visita, además de disfrutar de un buen plato de patacones con pescado frito, se puede topar desde con diplomáticos, alegres pescadores, turistas, etc. Todo esto al ritmo de una canción de salsa o reggae y de una refrescante cerveza.

Qué nos hace únicos

Para Cynthia, quien vive en el extranjero hace algunos años, los puestos y mesas con vegetales y frutas, la pesa que cuelga del techo superclásica, son detalles que han quedado grabados en su mente que probablemente no sean exclusivos del país, pero aun así forman parte de nuestra memoria, “extraño la sencillez, que en cierta forma puedo traducir en humildad, tiene su encanto”, afirmó.
Mientras, por otro lado, Martha Bucaram opina que algo que nos hace especiales es que solemos ser muy amigueros, así también, añade que somos de celebrar por todo: “los cumpleaños de los compañeros de oficina, siempre se inventa jugar amigo secreto, y a una mujer embarazada le hacen como tres “baby showers” diferentes”.

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