Vie, 07/19/2019 - 10:42
- Mente y Cuerpo
A veces sentimos que el día dura menos de 15 horas. Sí hay tiempo, solo que no sabemos manejarlo ¡Te enseño cómo hacer que el reloj esté de tu lado!
“No tengo tiempo”. Una de las frases que repetimos una y otra vez como la excusa más frecuente. “No tengo tiempo de cumplir mis sueños”, “no tengo tiempo para lograr esa meta”, “no tengo tiempo para nuevas actividades”. Hay mucho tiempo, pero manejarlo nos cuesta mucho, por no decir que demasiado.
¿Sabías que la organización reduce los síntomas de ansiedad? Cuando tenemos muchas tareas pendientes empezamos a estresarnos y nos bloqueamos completamente, dejamos de pensar para preocuparnos. Sin saber que algo tan sencillo como la organización es la solución a nuestro estrés. Poder visualizar el tiempo que tenemos, cómo lo vamos manejar y lo que podemos lograr poniéndonos metas a largo plazo, hace que tengamos mucha más confianza en lo que estamos haciendo, y nos brinda un esquema visual que nos ayuda a ubicarnos en tiempo y espacio.
He de confesar que soy de esas personas que lleva su agenda a todos lados y me encantan los calendarios, esto se debe a que este es el hábito que más me ha ayudado a que el tiempo me rinda. Por esto, quiero compartirte unos cuantos tips te harán organizarte más fácilmente:
Ver el tiempo
No hay nada mejor que, literalmente, ver tu tiempo y los recursos con los que cuentas. La mejor forma para hacer esto es en tu agenda y tu calendario. Haz un plan mensual, para tener una idea más global de tu tiempo; un plan semanal, para poder tener un enfoque claro; un plan diario, para mirar con lupa la meta de hoy. Es necesario hacer los tres, ya que cada uno te da una perspectiva diferente del tiempo con el que cuentas.
Nada de multitasking
El que mucho abarca, poco aprieta. Probablemente alguna vez has querido hacer 3 tareas a la vez, y es muy probable que lo hayas logrado, pero lo que te puedo asegurar es que no hay excelencia cuando no hay enfoque. Una cosa a la vez, así como dicen las mamás, ya que no es cuestión de terminar rápido, si no de lograr y de hacerlo bien.
De poquito a mucho
He escuchado decir que tenemos que empezar con las tareas largas y grandes primero, pero en mi caso, jamás me ha funcionado. Soy de esas personas adictas a las listas de tareas y al ser muy visual, como muchos de ustedes necesito ver los ganchitos de “tarea terminada” para sentir que estoy avanzando. Debido a esto, empiezo siempre de lo más corto a lo más largo, esto me da una sensación de alivio ya que siento que he estado avanzando.
Aprende a decir que no
Una vez hayas plasmado bien tu lista de prioridades, es esencial que te la tomes muy en serio. Como en todo, puede haber inconvenientes y eventos imprevistos a los cuales es válido decir que no, a menos de que estos eventos sean urgentes. No significa que no podemos ser flexibles, pero siempre hay que dejar un espacio de tiempo para este tipo de inconvenientes. Tus proyectos son primero.
Para ella, para ti y para mí
Si les soy sincera, delegar se me hace muy difícil. Me encanta hacer las cosas por mí misma y sentirme segura, pero muchas veces no es lo más sano. Delegar tareas hace que seamos más eficientes, que rindamos mejor y que logremos más. Delega en tu trabajo y en tu casa, no tienes por qué encargarte de todo siempre. Observa las habilidades de los demás y analiza quién puede hacer mejor el trabajo en áreas en las que no te sientes muy segura. El trabajo en equipo siempre trae mejores resultados.
Ponle fecha
Este tip tenlo en cuenta a la hora de delegar, cuando pidas algo hazlo con una fecha incluida, así tendrás la certeza de que esta persona lo entregará a tiempo.
Prémiate
Motívate cada vez que cumplas con una tarea importante, mereces un premio por el esfuerzo dado. Esto hace que sientas satisfacción y te anima a terminar con la tarea que le sigue.
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