4 signos para saber que tu cuerpo no resiste la cafeína

¿Alguna vez te ha pasado de ir por un café con una amiga (o) y que afecte tu sistema digestivo? 

Si la respuesta es sí, queremos anunciarte que no eres la primera ni la última mujer a la que le ocurre. Si la respuesta es no, puedes continuar disfrutando de tu café y cambiar de nota, quizás te interese saber algunas particularidades de esta bebida para volverte toda una experta en ella. 

Además del dolor de estomago, hay otros indicadores que podrás observar para conocer si tu cuerpo no es tolerable a la cafeína. Aquí están: 

1. Estás deshidratada

Lauren Koffler advierte contra el consumo de cafeína cuando no estás tomando suficiente agua. La cafeína, en el café, por ejemplo, puede deshidratar el cuerpo, por lo que si tu pis es demasiado amarillo o te sientes mareada (esto sería debido a la falta de líquidos), podría significar que beber café es demasiado fuerte para tu cuerpo.

2. Tus intestinos son demasiado intensos

La cafeína puede tener el efecto de mandarte al baño, pero si tienes mala digestión de la cafeína, y estás teniendo movimientos intestinales intensos en el día, podría significar que la cafeína no le sienta bien a tu cuerpo. Desafortunadamente, decirle adiós al café podría ser lo que tu cuerpo necesita.

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3. Sientes ganas de orinar muy seguido

Mientras que puedes llegar a estar deshidratada, por el otro lado, es posible que encuentres la necesidad de orinar mucho después de beber cafeína, explica Susan Berkman, un dietista registrada en el Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio, al portal Bustle. Si estás visitando el baño muy seguido en el día, puede que también debas decirle adiós a la cafeína. 

4. Estás perdiendo densidad muscular

Si tienes osteoporosis, podrías estar en un riesgo aún mayor. La doctora Lisa Ashe, directora médica de BeWell Medical Group, dice que la cafeína puede eliminar el calcio del cuerpo, lo que puede provocar osteoporosis y pérdida de masa ósea. Ashe dice, "La cafeína también puede disminuir la absorción de calcio y aumentar la excreción de calcio, lo que puede conducir a la pérdida ósea".