- Familia
Un proceso legal por el cual un Tribunal de familia, luego de haber comprobado mediante pruebas presentadas el estado de enajenación mental de una persona, la priva de la administración de sus bienes.
Aun cuando no está regulado en el Código de Familia (sí está regulada en el Código Judicial, en sus artículos 1307 al 1324), esta figura jurídica es de suma importancia conocerla puesto que muchas veces nos encontramos en ciertas situaciones o condiciones en las que se hace necesario, por temas de enfermedad o discapacidad de algún familiar, requerir su tutela.
Pero antes de continuar explicándote todo lo relacionado al proceso, es importante definir en su concepto. “La INTERDICCIÓN es un proceso por el cual un Tribunal de familia, luego de haber comprobado mediante pruebas presentadas el estado de enajenación mental de una persona, la priva de la administración de sus bienes”.
Este proceso puede ser promovido de conformidad con lo que establece el Código Judicial en su artículo 1307 por:
- El cónyuge (en casos de enfermedades terminales u crónicas que afecten su capacidad mental).
- Por los parientes del supuesto incapaz que tendrían derecho a sucederle ab intestato (es decir, heredarles sin testamento).
- Por el Ministerio Público.
- Por cualquier persona cuando el demente puede ser de peligro para los habitantes de un lugar (requiere de otros aspectos).
Es importante destacar que el JUEZ DE FAMILIA le nombrará al supuesto interdicto demandado un curador, quien es la persona encargada de los cuidados y manejo de todos sus bienes, en caso de tener.
Si la demanda de INTERDICCIÓN fue puesta basándose en la enajenación mental (la locura, demencia o pérdida de razón en Derecho Civil es causa de restricción de la personalidad jurídica, debiendo el enajenado ser sometido a tutela), el juez personalmente será quien interrogue al demandado, salvo los casos en que se encuentre en un hospital o sala psiquiátrica, y esto se deberá comprobar con su respectiva certificación.
¿CÓMO SOLICITAR EL PROCESO DE INTERDICCIÓN?
Este proceso se hace mediante abogado, ante el JUZGADO SECCIONAL DE FAMILIA. Una vez presentada y admitida la demanda, se fijará un edicto en que se emplazará a todos los interesados o aquellas personas que crean tener derechos a intervenir en el proceso para que se hagan parte si tienen a bien hacerlo.
Es importante aportar las pruebas necesarias que demuestren que la persona que deseas interdictar cumple con los aspectos médicos – legales para realizar la interdicción (certificado médico, pruebas testimoniales, entre otros).
Cuando se decrete la interdicción por medio de la sentencia, el juez confirmará la designación del curador de los bienes del interdicto que ha sido nombrado provisionalmente, hasta tanto no exista o se presente alguna persona a pedir la guarda del incapaz.
Estas sentencias definitivas dictadas en estos procesos serán consultadas y los autos sobre las medidas cautelares son apelables.
Por ejemplo, si tu familiar es sordo y lo quieres interdictar, debes probar que esa persona no sabe ni leer ni escribir, puedes conseguir testimonios de personas que conozcan a tu familiar sordo y que den fe de que lo expuesto es verdad. El juez, por su parte, también examinará a la persona para confirmar la veracidad de la prueba testimonial presentada.
Si tu familiar es una persona adulta, deberás presentar certificación de un psiquiatra que de fe de que tu familiar presenta pérdida progresiva de sus funciones cognitivas producto de su edad o de situaciones de fuerza mayor, las cuales lo han privado de realizar actividades de la vida cotidiana y de la administración de sus bienes.
Para los casos de la rehabilitación de un interdicto judicial, este trámite se seguirá por medio de apoderado legal por vía de incidente. El juez, en esos casos, ampliará los términos de acuerdo con las circunstancias.
Si tienes un caso de menor con discapacidad, padres, hermanos o cualquier otro familiar que requiera de este proceso, no dudes en buscar ayuda de un profesional que te oriente y te lleve responsablemente tu proceso, a fin de que puedas cuidar de modo correcto, no solo los bienes de la persona que será interdictada, sino de ella misma, ya que lo importante es que esa persona esté segura en el aspecto emocional.
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