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Te cuento que sí y que no te puedes llevar a casa.
Se puede encontrar bolígrafos, pad de notas, cremas, champús, velas y los mejores productos... Aquellos que hacen que la estadía para los huéspedes en los hoteles sea placentera. En el lenguaje hotelero se les define como: “amenities” (papel timbrado, bolígrafo, entre otros accesorios) y “toiletries” (productos destinados para el aseo). Aquellos son el objeto del deseo de muchos, destinados a sacar el “cléptomano interno”; siendo honestos, ¿quién no se ha sentido tentado (a) a llevarse algo? Hay quienes se preguntan si esto es robar o está a propósito colocado para retirarlo.
“Es impresionante, tenemos un hostal y mi ama de llaves debe reponer las toallas continuamente”, opina la propietaria de un hostal. Un gerente de un hotel, que prefirió quedar en el anonimato, cuenta: “La gente se lleva de todo. Luego se extrañan de que se pidan depósitos altos (que se devuelven al final de la estancia).
En respuesta a esto, en Reino Unido, se creó una lista negra llamada “Guest Scan”, en la que queda registrado el nombre de los clientes que tienden a substraer objetos del hotel que no son amenidades y también aquellos que tienden a causar desastre en las habitaciones. Uno de los hoteles que hizo algo diferente fue la popular cadena Holiday Inn —quienes pierden alrededor de 560,000 toallas al año— la cual lanzó la campaña “Towel Amnesty Day”. En ella se alentaba a los viajeros que “accidentalmente” se habían llevado una toalla a devolverla sin hacerles preguntas. Por cada toalla recibida se donaría a los niños; así también, una oportunidad para sentirse libre de remordimiento alguno.
¿Qué sí te puedes llevar?
El blog El Hotelero enumera los artículos que son permitidos llevar en tu maleta:
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Los “amenities” o amenidades: aquellas botellitas de gel, champú, “body lotion”, pastilla de jabón, pasta dental, etc. “Llevártelos no se considera robo, ya que estos sí que están incluidos en la factura de la habitación”, se explica en el sitio y añade también que como dato curioso, el hecho de que los clientes se lleven o no estos productos cuando terminan su estancia es un indicador de satisfacción.
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El bolígrafo y el bloc de notas: Si eres amante de la papelería, tranquila, es permitido. Los expertos en el tema mencionan que “todo lo que sea pequeño y tenga el logo del hotel se puede tomar”. El logo cumple la función de dar publicidad al hotel, una manera de hacer marca.
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Pantuflas: No todos las ofrecen; sin embargo, aquellos que son exclusivos, además de jabones, tienen babuchas para los huéspedes. Por ser desechables, se pueden llevar. Lo que no se puede garantizar es cuánto tiempo te van a durar.
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La botella de agua: A veces sí, a veces no. Todo dependerá de si se indica con claridad. Por lo general dejan una botella afuera, como cortesía. Pero aquellas que están dentro de la refrigeradora, lo más probable es que tengan un costo adicional.
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Los bombones que se colocan en la almohada: Sin dudarlo, es permitido comerlos al igual que las frutas. Eso sí, hay que comerlos enseguida.
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Los fósforos: Por lo general, tienen impreso el logo del establecimiento, tienen la función de hacer marca, entonces es permitido tomarlos.
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El café: Muchos hoteles incluyen el precio desde que se reservó. Entonces, a disfrutar.
Lo que no te puedes llevar
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Lo que no debes llevarte nunca lamento informarte que la almohada, por más deliciosa que esté, no se debe coger. Así también, el juego de sábanas, cojines, “matress pad” (aquella funda que tiene el colchón).
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El albornoz, es decir, la bata de baño, por más terciopelo que tenga, tampoco se debe llevar a la casa. Y, obviamente, las toallas se quedan en el hotel. Está de más decirte que los ceniceros, vasos, copas, cubiertos y demás objetos se quedan en tu estadía. Y tú, ¿te has llevado algo? ¡Cuéntame tu experiencia!